Men llegó hace unos años a Barcelona después de recorrer todos los clubs de su Cantábrico natal (La Real, Locomotive, Whipporwill…), donde comenzó a causar sensación en las cabinas desde principios de los 90. Tras instalarse junto al Mediterráneo, empezó a ganarse un merecido nombre con sus sesiones, hasta llegar a ser considerado uno de los mejores exponentes del techno local.